O está en su cuarto jugando, llego y me acuesto en su cama. Tuve un día pesado y quiero estirarme un poco antes de comenzar a jugar. El viene y se acuesta a mi lado y me dice:
- Mamá, ¿jugamos a adivinar animales?
- ¡Sale!- Me entusiasma que puedo seguir acostada y sobre todo que nunca lo hemos jugado y es él quien lo propone.
- Bueno, yo empiezo. Un animal que vive en las casas y hace miau.
- El gato.
- Sí, te toca.
-Un animal negro con blanco que come bambú.
- Los panditas.
Así adivinamos, entre otros, un animal que es como un gato grande y es el rey de la selva, un animal que le gusta colgarse de árboles con su cola, un mamífero que vive en el agua y es enorme, y hasta un animal que vive en la casa y es una nube y ladra. De repente dice O:
- Un animal que tiene colmillos grandes, grandes y es de chocolate.
- ¿Cómo de chocolate? ¿Café?
- No, de chocolate.
Pienso un rato y le digo:
- Me rindo.
- Ay mamá, un mamut.
- Claro -digo entre risas- cómo no lo pensé.
4 comentarios:
Crecen tan rápido y se vuelven tan ingeniosos... :) Que ganas de verlos.
Yo tampoco habría adivinado, sis.
¡Ay Mamá de O! ¡Era obvio! Ok no.
Que bonito procesan y piensan, ¿no? Es bien importante meternos en su contexto para entender lo que es importante y significativo para ellos ya que dista mucho de lo que es importante para nosotros.
Un abrazo.
¡mi vidaaaaaaaaaaa!
Lo amo. Lo amo. Lo amo.
Sí, soy y seré siempre su fans.
UN abrazo para ti y uno más (así, mega enorme) para O.
Los quiero.
aaay yo sí supe!!!
y el animal que es dos veces animal?
jaja.. O es genial.
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